¡Hola, adictos!
¿Cómo estáis? Yo muy bien, muy contenta porque al fin estoy de vacaciones, así que espero poder estar más por aquí a partir de ahora, al menos durante estas dos semanitas. Tengo muuuuuuchas cosas pendientes, correos que leer, entradas que publicar, libros que leer y blogs que comentar. Os pido paciencia, ya que intentaré ir poniéndome al día poquito a poco, a ver si un poco más de tiempo libro me cunde para hacerlo jaja
Para empezar bien las vacaciones, os traigo un libro muy curioso. Aquí os lo dejo:
Nombre: Ciudades de papel.
Autor: John Green.
Editorial: Nube de tinta.
Páginas: 363.
Sinopsis
En su último año de instituto, Quentin no ha aprobado ni en popularidad ni en asuntos del corazón... Pero todo cambia cuando su vecina, la legendaria, inalcanzable y enigmática Margo Roth Spiegelman, se presenta en mitad de la noche para proponerle que le acompañe en un plan de venganza inaudito. Después de una intensa noche que reaviva el vínculo de una infancia compartida y parece sellar un nuevo destino para ambos, Margo desaparece dejando tras de sí un extraño cerco de pistas.
Con un estilo único que combina humor y sensibilidad, John Green, el autor de Bajo la misma estrella, teje una emotiva historia a la que da vida un inolvidable elenco de personajes. Ganadora del prestigioso premio Edgar, Ciudades de papel aborda los temas de la amistad, el amor y la identidad para plantearnos una pregunta: ¿vemos en los demás, y en nosotros mismos, solo aquello que queremos ver?
Crítica propia
Este es el segundo libro de John Green que leo, y aunque me gustó más Bajo la misma estrella, tal vez por la temática o los personajes, esta ha sido una lectura que ha valido mucho la pena. No ha hecho más que confirmarme que este autor es increíble, por lo que no me perderé ninguno de los libros que publique,
"-Las cosas nunca suceden como imaginas (...)
-Sí, es verdad-le digo. Pero lo pienso un segundo y añado-: Pero también es verdad que si no imaginas, nunca pasa nada".
Esta historia nos la cuenta Quentin, nuestro protagonista, un joven de dieciocho años que lleva una vida de lo más normal, con la que es feliz, quedando con sus amigos Ben y Radar. Pero un día todo cambia cuando Margo, su misteriosa y atractiva vecina, le propone salir por la noche para vengarse de aquellos que les han hecho daño, viviendo una aventura por toda la ciudad. Sin embargo, al día siguiente de esta magnífica aventura que ha dejado a Quentin desconcertado, Margo desaparece, siendo Quentin el único capaz de encontrarla a partir de una serie de pistas que ella ha dejado. Así, nuestro personaje principal se embarcará en la búsqueda de la chica que ocupa sus pensamientos.
Este libro es diferente a muchos otros. Con esto me refiero a que nunca había leído nada parecido. Es como una gran metáfora que encierra reflexiones y mensajes, algunos que se pueden leer directamente y otros que debes interpretar. Es un libro hecho para hacer pensar, no solo para entretenerte en una tarde aburrida, sino para transmitir al lector algo más.
Obviamente, no todo ha sido reflexión. Este libro cuenta con momentos divertidos, sobre todo por comentarios que hace algún que otro personaje, además de conseguir mantenerte intrigado gracias a esas pistas que debemos descubrir. ¿Dónde está Margo y por qué demonios se ha ido sin dejar rastro?
"A Margo siempre le gustaron los misterios. Y teniendo en cuenta todo lo que sucedió después, nunca dejaré de pensar que quizá le gustaban tanto que se convirtió en uno".
Como no podía ser de otra manera, sabiendo que el escritor es John Green, el ritmo del libro es genial, fácil de leer, que te atrapa y no lo dejas hasta que lo termines.
Ahora me centraré más en los personajes.
Quentin es un chico que me ha caído bien, un tanto timidillo e inseguro, pero muy buena persona. El Quentin del principio del libro no tiene que ver con el del final, ya que experimenta una evolución a mejor. La única pega que le pongo es que el 95% se lo pasa hablando de Margo, con todo el mundo, y eso a veces resultaba algo cansino, pero bueno, se le perdona porque estaba enamorado.
Margo es una chica peculiar. Tiene un carácter original, un tanto extraño, sí, pero fascinante en sí mismo. No es que me cayera mal, pero me pareció una egoísta e incluso manipuladora, pero también puede que se deba a que lleva una vida que no le gusta y en la que no encaja. Es muy aventurera, y sus planes la verdad es que me han sorprendido, debía de tener mucho tiempo libre como para pensar en todo lo que hizo jaja
Radar es el típico friki de los ordenadores, que me ha encantado por su forma de decir las cosas, de llevar la vida y sus manías. Es un chico fantástico, por eso me ha encantado tenerlo presente en toda la lectura. De Ben no puedo decir lo mismo. Sinceramente, se me hizo muy pesado, con esa obsesión que tenía por encontrar chica y comentarios que eran para estamparlo contra la pared (vale, creo que ahí me he pasado de agresiva jaja). Lacey es un personaje que me ha sido indiferente, ha estado ahí interviniendo, pero no me ha resultado especial, ni para bien ni para mal.
"Margo conoce el secreto de marcharse, el secreto que yo acabo de aprender: marcharte te hace sentirte bien y es auténtico solo cuando dejas atrás algo importante, algo que te importaba. Arrancar la vida desde la raíz. Pero no puedes hacerlo mientras tu vida no haya echado raíces."
De la relación amorosa entre los protagonistas no hay mucho que decir. Apenas hay romance, más bien son pensamientos y toques cariñosos, ha sido como un amor inalcanzable, tal vez por ello me ha gustado tanto. De hecho, más que centrarse en el amor, lo que destaca es la amistad que Q tiene con sus amigos, y eso sin duda es algo que hay que valorar positivamente, ya que de vez en cuando un libro así no viene nada mal.
Del final, solo he de decir que es cerrado y el más adecuado y realista que podía tener, ayudándote finalmente a entender la historia en sí. Me he quedado muy satisfecha por como ha terminado todo.