Esta semana voy a publicar sobre todo reseñas de lecturas conjuntas, ya que tengo un plazo para publicarlas y creo que lo mejor es dejarlas por aquí cuanto antes. Esta vez os dejo un thriller que me ha dejado muy buen sabor de boca, espero que disfrutéis de la entrada.
Nombre: El método 15/33
Autora: Shannon Kirk
Editorial: Ediciones B.
Páginas: 368.
Imaginad a una chica de dieciséis años, embarazada y vulnerable, a quien acaban de arrancar de la tranquilidad de su hogar para arrojarla dentro de una furgoneta destartalada. Raptada… Sola… Aterrorizada.
Ahora, olvidaos de ella.
Imaginad en cambio a una prodigiosa manipuladora de dieciséis años que, desde los primeros instantes de su secuestro, se centra, con tanta serenidad como determinación, en dos cosas: salvar al niño que lleva en su seno y vengarse.
Metódica y calculadora, pone a punto un plan organizado de manera casi científica en el que nada está librado al azar. Su férrea voluntad y su ingenio serán sus mejores armas contra la brutalidad de sus raptores, y lo único que le falta por hacer es esperar el momento ideal para lanzar su ataque.
Una joven de dieciséis años es secuestrada mientras se dirigía al instituto, y el secuestrador la encierra en una habitación. Allí la alimenta y una vez cada pocos días la visita un médico para comprobar que su embarazo se esté desarrollando correctamente.
Esta es la historia que nos cuenta este libro. Por primera vez me he metido de lleno en un secuestro de los de verdad con una novela, sin pelos en la lengua respecto al odio, el sufrimiento, el sentirse atrapada sin saber qué hacer. En otros libros que he leído si hay secuestros, pero tienen menos importancia y/o se profundiza en ellos mucho menos que en este libro.
El comportamiento que se espera de una chica adolescente a la que secuestran es que se vea desesperada, sin saber qué hacer, que llore y se encierre en sí misma, que suplique por su vida. Nuestra protagonista no hace nada de esto, debido a su inteligencia superior a la media y a su capacidad para controlar sus emociones. Gracias a ello, no desperdiciará el tiempo en llorar, sino que desde el primer día estará planeando su huida y, también su venganza.
"Engañar a alguien para que piense que tiene poder es la demostración de poder por antonomasia."
Sin duda, lo mejor del libro es la protagonista. No os voy a decir su nombre porque lo consideraría spoiler, ya que hay algo que me sorprendió mientras leía que si os desvelara su nombre, arruinaría por completo. Me ha encantado lo fría, calculadora y retorcida que es, su capacidad de observarlo todo y sacarle utilidad a cualquier objeto, y su manera de perfeccionar las cosas. Sí, la he admirado, aunque tal vez sea un poco radical, en el sentido de que es bastante despiadada y desea el sufrimiento de sus captores, a toda costa. Aunque, pensándolo bien, creo que si yo o algunos de mis seres queridos se encontrara en su situación, yo también desearía lo mismo que ella. Su sed de venganza y el amor que siente por su hijo será lo que le empuje a actuar y planificar todo detalladamente, para que todo salga a pedir de boca. Es una de las protagonistas más interesantes con las que he tenido la suerte de toparme, y la autora consigue meternos perfectamente en su cabeza, por lo que he disfrutado muchísimo con ella. Aunque en ocasiones dé verdadero miedo. Mientras ella está secuestrada, también contaremos con la ayuda del detective Liu, el agente del FBI que se encarga de este caso. Me han gustado mucho los capítulos contados por él, ya que vemos como avanza la investigación desde fuera y conocemos a este personaje, que tiene mucho que contar.
Quizás uno de los problemas de este libro es que todos los personajes son la bomba, porque tienen unas habilidades que les hacen destacar entre las personas normales. Me explico: la protagonista tiene capacidad de gestionar sus emociones de una manera casi inhumana y tiene una inteligencia superior, su madre es una abogada que gana todos los casos que se le presentan, Liu es un detective buenísimo, su compañera Lola es de lo más perspicaz... Incluso Lenny, el novio de la prota, es de lo más inteligente. Lo que quiero decir es que está bien tener a un personaje o dos que sobresalgan, pero no es creíble que todos los que aparezcan sean tan fenomenales y especiales, porque nadie se lo cree. Esa supergenialidad no me la trago, lo siento. Por cierto, tampoco me trago que los padres de los protagonistas no se dieran cuenta de que su hija estaba embarazada de siete meses. Por muy ocupados que estén, eso se nota, tanto visualmente como por el comportamiento de la chica. Menudos padres están hechos.
También me ha gustado que no se juzgue el tema del embarazo adolescente. La prota tiene dieciséis años y está embarazada, pero no se trata el tema como si fuera lo peor del mundo o desde un punto de vista con crítica negativa. Simplemente, sucede debido a que se rompe el preservativo y ya está, ella decide tenerlo y sus padres, a pesar del shock inicial, la apoyan. Obviamente, hay que tener cuidado con esas cosas porque un bebé no es cualquier cosa, sino que requiere una enorme responsabilidad, pero me refiero a que no se ve como si la protagonista estuviera loca por querer tenerlo, ni la gente la mira mal por estar embarazada tan joven. También está muy bien tratado el tema de la venganza. Ya se sabe que ojo por ojo y todo el mundo quedará ciego, sí, pero eso está muy bien en la teoría. Cuando te ves prisionera, tu secuestrador te amenaza con matarte cuando tengas al bebé y te ves sola sin nadie a tu lado, una de las cosas que te saca adelante es la venganza, guste o no. Nuestra prota quiere venganza, lo que es normal, al fin y al cabo es humana, aunque pueda mantener a raya sus sentimientos, y no se la juzga por las cosas que hace tras el secuestro. Cada uno puede verlo a su manera, pero yo la entendí a la perfección. Solo hay que plantearse la pregunta que en el libro aparece en una ocasión: ¿qué harías si fueran a dispararle a tu hijo?
"El amor es la emoción que más fácil resulta apagar, pero la más difícil de encender. En cambio, las emociones que se encienden con más facilidad, pero cuesta más apagar, son: el odio, el remordimiento, la culpa y la más fácil de todas, el miedo."
Otra cosa que no me ha terminado de convencer es la narración. No es que sea mala, pero tampoco destaca. No sé, me resultó bastante rara. De hecho, debido a la narración me costó engancharme a la lectura, ya que noté el ritmo bastante lento, sobre todo durante la primera mitad. Como he dicho, no es que sea mala, a lo mejor la cosa está en que la autora lo describe todo de una manera muy visual, y claro, esto hace que el ritmo se ralentice.
Por último, debo decir que me animé a leer esta novela gracias a Folloner@s club. Si todavía no sabéis d qué va esta iniciativa, no sé a qué estáis esperando, ya que merece muchísimo la pena. Haced click en esta imagen para saber cómo podéis participar:
¡Un besote!