Twisted Hate

 ¡Hola!

¿Cómo estáis? Yo hoy resguardada en casa, que hace un frío que pela y aquí estamos en alerta por temporal. Pero en general bien, tranquilita, a ver si hoy sí puedo leer un poco, y continuar viendo Stranger Things, que estoy enganchada jaja

Poneos cómodos y a disfrutar de la reseña, espero que os guste ^^

Nombre: Twisted Hate.

Saga: Twisted #3

Autora: Ana Huang.

Editorial: Planeta.

Páginas: 608.

Traducción: Mariona Gastó Jiménez

Él la odia... casi tanto como la desea. Josh Chen es ambicioso, arrogante y no se le resiste ninguna mujer. Ninguna excepto Jules Ambrose. La enemistad entre ellos es tan obvia como lo es su deseo que, desde que se conocen, no hace más que aumentar. Y, cuando la tensión por fin estalle, Josh propondrá un trato imposible de rechazar: un acuerdo entre enemigos con beneficios y3 sencillas reglas: Sin celos Sin condiciones. Y, por supuesto, sin enamorarse. Extrovertida y ambiciosa, Jules Ambrose ha dejado atrás un pasado de desenfreno para centrarse en un objetivo: convertirse en abogada. Y ahora mismo, lo último que necesita es involucrarse con un hombre que es tan insufrible como atractivo. Pero con el paso del tiempo, se dará cuenta de que Josh es mucho más de lo que aparenta. El hermano de su mejor amiga. Su némesis. Y su único refugio La suya es una pareja hecha en el infierno, y cuando los demonios de su pasado los alcancen, se enfrentarán a verdades que podrían salvarlos…o destruirlos por completo.

1. Twisted Love | 2. Twisted Games

Regresamos a la saga Twisted. Recordaros que, aunque las historias sean independientes, dado que las parejas protagonistas son diferentes, es más que recomendable que leáis los libros en orden de publicación, debido a que hay tramas secundarias de los protagonistas de libros anteriores y se entienden mejor las relaciones de los personajes gracias a haberlos leído, de lo contrario, es probable que nos os encontréis un poco perdidos.

Si os digo la verdad, este libro ha sido el que menos me ha gustado de los tres que he leído. La relación es la que menos me ha convencido, los protagonistas son los que menos me han gustado (sobre todo Josh), y, de hecho, un comportamiento suyo de cara al final marcó un antes y un después en la sensación que tenía de la novela. Pese a ello, he disfrutado de su lectura, aunque los otros me hayan gustado más. Al final, son libros que dan lo que uno espera de ellos, una historia para desconectar, que no va a ser la historia de tu vida, pero tampoco necesitas que lo sea.

"La primera impresión que tenemos de alguien es la que se queda grabada más tiempo en nuestra mente; sin embargo, al contrario de lo que muchos piensan, hay gente que sí cambia. La única pega es que la gente cambia más rápido que nuestros prejuicios".

Twisted hate es el más largo de los tres libros que llevamos, pero no por ello se hace más pesado ni denso que los anteriores. Ana Huang, con su manera de escribir, sigue enganchándonos muchísimo, pues los diálogos son muy fluidos y encima contamos con el cliché de enemies to lovers, lo que hace que estemos aún más pegados a las páginas del libro, porque el tira y afloja constante entre Jules y Josh es oro. De libros anteriores se ponía de manifiesto lo mucho que se detestaban, no pierden oportunidad en meterse el uno con el otro cada vez que se ven, pero ya conocéis ese dicho común, "los que se pelean, se desean". Utilizan un sarcasmo sin límite en toda conversación posible e incluso acostumbran a sabotearse entre sí. Pero luego empiezan a pasar tiempo juntos, a abrirse, compartir momentos íntimos, y la cosa va cambiando. Es curioso ver cómo pasan del enfado y la rabia que sienten el uno por el otro y por las injusticias de la vida en general, que se aprecian en las primeras escenas, a tratarse con más cariño y admiración. Incluso impacta un poco, dado que en los primeros acercamientos en los que no actúan como personas que se odian, siguen siendo bruscos y tratándose con algo de rabia. Por cierto, comentaros que esta serie está catalogada como dark romance, por lo que contiene un puñado de escenas sexuales explícitas, en el caso de este libro, bastante bruscas. Yo reconozco que algunas me dieron un poco de cringe, no me escondo.

Personalmente, he visto más coherente la personalidad de Jules que la de Josh, por todo lo que ha tenido que pasar con su madre y su padrastro, y cómo tuvo que buscarse la vida en su momento y se vio contaminada por las malas compañías. Me parece de admiración cómo ha salido adelante y se lo ha currado para poder sacarse la carrera universitaria y tener un buen grupo de amigas, dadas las circunstancias que han influido en su vida desde pequeña. Josh, en cambio, es más chulo que un ocho. Me gusta la parte de Josh en su trabajo como médico, en su empatía con los pacientes y en cómo se desvive por hace bien su trabajo. Sin embargo, en general él es más chulo que un ocho, y en ocasiones llega a ser dañino, incluso cruel. Ojo, Jules no es una santa, pero Josh siempre va a dar los golpes bajos, a donde le duele de verdad a la persona. Tiene detalles bonitos con Jules, y se nota que le importa, pero en mi opinión se comporta con mucha crueldad en una parte del libro, y todavía no he podido perdonarlo por eso.

Por otro lado, me ha gustado cómo se refleja que a veces nosotros nos torturamos demasiado, considerando que no nos merecemos las cosas buenas o que vamos a ser juzgados toda la vida por los errores del pasado, cuando no es así, siendo, por tanto, demasiado duros con nosotros mismos. Hay que aprender a perdonar, y también a perdonarse.

¡Besos!