GhostMaster

 ¡Hola, hola!

En nadita es Halloween, la noche más terrorífica del año. ¿Tenéis pensado hacer algo en especial para celebrarlo? Yo seguramente vaya a una fiesta con unos amigos, pero todavía no he decidido si voy disfrazada o no. ¿Me dais ideas?

Para ambientar un poco este domingo, os traigo una reseña de un libro donde los fantasmas tienen mucha importancia. Espero que la disfrutéis:

Nombre: GhostMaster.

Autor: Víctor Reyes Céspedes.

Editorial: Malas Artes.

Páginas: 162.

Kary Waterson es una chica normal, con unos padres comprensivos y una vida ideal para su edad, pero que, por estar en el momento y en el lugar equivocados (o correctos), se convierte en la cazadora de espíritus más poderosa del mundo. Súbitamente tiene que empezar a lidiar con un mundo totalmente desconocido para ella, en la que peligrosos personajes luchan para obtener el poder que ella posee. Inexperta, con una crisis de identidad sexual, y con la ayuda de dos fantasmas de caracteres muy dispares (una niña ciega que lleva sus globos oculares en la palma de su mano, y un anciano cascarrabias capaz de golpear con su bastón) tendrá que aprender a utilizar su poder y sobrevivir a los rumores del instituto, a las pesquisas de la Policía, a peligrosos pandilleros y a una siniestra organización de cazadores de espíritus, y todo para poder salvar a su mejor amiga (y puede que algo más) Dora, que ha perdido su cuerpo humano.

Kary es una adolescente que lleva una vida normal, hasta que decide ir a visitar con su mejor amiga Dora a Hellen, su vecina "adivina", momento en el cual ocurre una especie de explosión, a partir de la cual el alma de Dora queda encerrada en el cuerpo de una gata y Hellen queda gravemente herida, traspasándole sus capacidades a Kary, que repentinamente, se convierte en una cazadora de espíritus.

Ya solo con lo que os he contado, que es el inicio del libro, la cosa empieza fuerte, ¿verdad? GhostMaster es un libro que está lleno de acción, la hay en todas sus páginas, y está contado todo de manera sencilla y directa, que engancha y te hace desconectar. Personalmente, he logrado evadirme del mundo real gracias a esta lectura, que, libre de contener descripciones muy extensas o gran cantidad de información, aporta lo necesario para disfrutar de la historia y entender todo lo importante de la situación que nos presenta el autor, a través de Kary y su posesión más preciada para la labor, la piedra de Merlín. Asimismo, me gusta que nos veamos metidos de lleno en una trama de lucha de poder, en la que tenemos que intentar conseguir cazar espíritus, pero también atrapar a uno de los mayores criminales conocidos, Diego Valdés, todo ello intentando disimularlo ante el profesional que está investigando la desaparición de Dora.

"-¿Por qué crees que lo ha quemado? -preguntó Dora.

-Porque Diego Valdés sabe que soy una cazadora de espíritus, y que lo estaba siguiendo. El mono nocturno tiene miedo".

De lo que más he disfrutado ha sido, sin duda, de los personajes, concretamente, de los fantasmas. Helbert me ha hacía mucha gracia, por su forma de pegar bastonazos a diestro y siniestro y soltar un ¡bah! y desaparecer cada vez que lo picaban. Janice, en cambio, me ha gustado por sus habilidades como mentora, su determinación y que nos muestra que esconde una gran sabiduría en ese cuerpo de niña. Además, la historia de sus muertes me removió por dentro, son personas que sufrieron mucho y que, a pesar de ello, han seguido al pie del cañón y superado esos traumas, convirtiéndose en grandes fantasmas. Otro fantasma que llamó mi atención fue Albert, que aparece ya más avanzada la lectura, pero tiene una habilidad muy pero que muy útil. Kary ha sido una buena protagonista, muy espabilada y dispuesta a lo que sea con tal de ayudar a Dora.

Lo único que me ha convencido un poco menos ha sido la brusquedad de algunas situaciones, en el sentido de que repentinamente cambian los comportamientos, los personajes se adaptan muy rápido a las novedades, etc. Como ejemplo pongo la relación Dora-Kary, no se aprecia una evolución en el tipo de cariño de Kary hacia Dora, cosa que me pareció poco creíble, sobre todo teniendo en cuenta que nunca se había planteado una orientación sexual que no fuera la hetero. Me gusta que haya representación LGTBI+, pero creo que habría que haber profundizado más en el tema y hacerlo de forma más progresiva. En realidad, creo que el resumen es que no era necesario romance, simplemente la historia estaba bien sin ese añadido.

El final me ha gustado mucho, marca el cierre de una parte de la trama, pero queda la parte principal abierta, por lo que seguramente contaremos con una segunda parte. Ojalá sea así, me gustaría saber cómo sigue la historia, ver cuántos espíritus logran atrapar y el papel que desempeñará Jacob, un personaje con intenciones no muy buenas que tiene pinta de dar mucho juego.

¡Muchísimas gracias al autor por el ejemplar!

¡Besos!