Apollyon

¡Buenas, adictos a la lectura!
Os dejo con la cuarta parte de una saga que se ha colado entre mis favoritas, por lo fantástica que es. Espero que os guste la reseña ^^

Nombre: Apollyon.


Saga: Covenant #4


Autora: Jennifer L. Armentrout.


Editorial: Kiwi.


Páginas: 448.

No puedes encararte con el destino… y, ahora, tampoco con Álex. Ella siempre ha temido dos cosas: perderse a sí misma en el Despertar y que le den el Elixir, pero el amor siempre ha sido más fuerte que el destino y Aiden St. Delphi está dispuesto a declararles la guerra a los dioses —y a la propia Álex— para conseguir que vuelva a ser ella. Los dioses han matado a miles de personas y podrían destruir ciudades enteras en su intento de evitar que Seth consiga el poder de Álex y se convierta en el Asesino de Dioses. Pero romper la conexión entre Álex y Seth no es el único problema; hay algunas lagunas en la teoría de «un Apollyon no puede ser destruido» y la única persona que puede detener la destrucción absoluta está muerta desde hace siglos. Abrirse paso a través de las barreras que guardan el Inframundo, buscar un alma entre millones y, de alguna manera, volver será bastante duro. Álex puede conseguir evitar que Seth se convierta en Asesino de Dioses… o puede terminar siéndolo ella.

0.5 Daimon | 1. Mestiza | 2. Puro | 3. Deidad | 3.5 Elixir

Deidad nos dejó con los ojos como platos por su rompedor final. Las ganas de saber más se vieron algo satisfechas con Elixir, gracias a lo que nos cuenta Aiden sobre ese tramo de la historia. Ahora le llega el turno a Apollyon, un libro que me ha encantado y mantiene la calidad de esta gran saga, que ya es una de mis favoritas, sin ni siquiera saber cómo termina.

Apollyon es un libro algo más pausado, he de decir que es el que más lento se me ha hecho, debido a que tiene menos acción que los otros, al menos en la primera mitad. Con esto no digo que me haya gustado menos, sino que el principio es más bien para asimilar lo que está ocurriendo, fortalecer relaciones entre los personajes y situarnos bien sobre el punto en el que estamos, para luego poder avanzar. Que, como vemos en la segunda mitad del libro, es lo que hacemos, porque esas páginas son mucho más potentes, sucede de todo y el pulso se nos acelera. Nuevos descubrimientos y sacrificios nos esperan en esta entrega.

No quiero desvelar nada, pienso que cuanto menos sepáis mejor, solo os diré que esta vez visitaremos lugares bastante tenebrosos, pero decisivos para que nuestros protagonistas puedan hacer frente a la guerra que se aproxima, conoceremos a nuevos dioses y seguirán combinándose intriga, intensidad y humor. Porque sí, a pesar de que el mundo está patas arriba y que el desastre es inminente, tendremos diálogos de lo más divertidos y escenas que te hacen soltar alguna que otra carcajada, como me ha ocurrido a mí cada vez que Apolo aparecía repentinamente. Tampoco faltará amor, que será introducido de una manera tierna, que no pastelosa, la verdad es que la relación entre los protagonistas me parece preciosa. Con sus más y sus menos, como todas las relaciones, pero que te hace suspirar porque ambos son encantadores.

"-¿Qué?-le dije, cuando no contestó.
-Me has dado la esperanza que necesito"

Con respecto a los personajes, ya sabéis que Álex es una pasada. Sin embargo, los sucesos que se han dado, tanto en los libros anteriores como en este, la han vuelto algo más madura, hasta ella misma se da cuenta. Ya no afronta las cosas de manera tan temeraria, sino que trabaja la determinación. Eso sí, sus comentarios sarcásticos seguirán a la orden del día, además de continuar siendo todo un torbellino. Cada vez que Álex hace algo, repercute en todas partes, es como un huracán. Por supuesto, yo sigo adorándola. Aiden es un personaje que me ha puesto un poco nerviosa, sobre todo con el tema del elixir, porque su actitud me daban ganas de zarandearlo; sin embargo, es un personaje leal, que nos muestra cada vez más sus sentimientos. Está acostumbrado a tenerlo todo bajo control, pero vemos como poco a poco va soltando el hilo en algunas situaciones y se permite vivir más. A él también le he cogido un cariño indecible. Eso sí, he echado mucho de menos a Seth, el cual aparece muy poquito, cosa que comprendo, dadas las circunstancias. Os parecerá extraño, pero a mí Seth me gusta mucho, a pesar de todo lo que ha ocurrido. Creo que es el mejor personaje construido por la autora, al menos en esta saga, debido a su complejidad. Una mezcla entre locura, pasión y egoísmo, no sabemos exactamente qué lo mueve ni cuál será su próximo paso. Estoy deseando saber qué le tiene preparado Armentrout a este personaje.

Ya sobre el final, diré que en los últimos capítulos sufrí como una condenada. Son escenas que me parecieron muy fuertes, me hicieron temblar, sufrir e hicieron pedazos mi corazón. Fue como si Álex y yo nos convirtiéramos en una única persona y, madre mía, cuántas emociones encierran esas páginas. Si a eso le sumamos que a autora vuelve a dejarnos con la miel en los labios, ya os podéis imaginar las ganas que tengo de leer Centinela, ¿verdad? Por un lado, estoy deseando ponerme con él, pero por otro, no quiero que esta saga termine. En serio, hacía mucho que una saga no me calaba tanto y no quiero despedirme de ella. Solo de pensarlo me pone un poco triste.

Recordad que estoy compartiendo mis impresiones sobre esta saga con mis compañeros de Folloner@s club. Si todavía no conocéis este fantástico club de lectura, podéis investigar haciendo click en la imagen:

¡Besos!